A pesar de estar cerca de cumplir 100 años, la marca Chrysler ha sido suspendida en cierta medida por la empresa matriz Stellantis en los últimos años. Chrysler, que alguna vez ofreció el magnífico Windsor de la década de 1940, el lujosamente largo Imperial y el New Yorker, así como el más reciente y divisivo Crossfire, ahora solo comercializa el envejecido sedán 300 y la minivan Pacífica.
No es exactamente la gama de modelos más brillante, pero parece que las cosas están a punto de cambiar gracias a su más reciente y decididamente espectacular con el nuev auto concepto Halcyon. Parece apuntar hacia un futuro eléctrico muy emocionante para una de las insignias más codiciadas de Estados Unidos.
Basado en la gran plataforma STLA del Grupo Stellantis, que formará la base de una serie de nuevos vehículos eléctricos en los próximos años, el Halcyon es un roadster eléctrico de cuatro asientos largo pero bien formado que se enfrentaría al Taycan de Porsche, el Lucid Air y el Model S de Tesla en caso de que alguna vez entre en producción.
Cuenta con tecnología Active Aero, que incluye un difusor trasero activo, así como un "área de paso aerodinámico de las aspas de aire delanteras, cortinas de aire delanteras y un parabrisas alargado" para ayudar al vehículo a atravesar el aire con mayor eficiencia.
Largo, bajo y decididamente elegante, Halcyon tiene una figura imponente e incluso las puertas tienen bisagras de mariposa para permitir un fácil acceso al interior cavernoso.
Por supuesto, es probable que nada de esto llegue a producirse, ya que ni siquiera hay mucha evidencia concreta de un tren motriz, pero Chrysler afirma que el concepto Halcyon cuenta con una batería de litio-azufre de 800 V en su núcleo, con la capacidad de cargarse a una velocidad de 40 millas por minuto con el cargador rápido adecuado.
Sin embargo, va un paso más allá porque también es compatible con la tecnología de carga inductiva, lo que significa que cualquier carretera y autopista con capacidad de transferencia dinámica de energía inalámbrica podría, en teoría, alimentar el vehículo a un alcance ilimitado. Dicho esto, la tecnología no es comercialmente viable, así que no contengas la respiración por eso.
Inteligencia Artificial por dentro
La llamativa y elegante silueta alberga un interior igualmente impresionante, que consta de cuatro asientos individuales que utilizan el reconocimiento biométrico para preparar el ambiente en consecuencia.
Esto encaja muy bien con la visión de Chrysler de un SmartCockpit que reconoce a los ocupantes y permite una transferencia perfecta de datos desde dispositivos personales al sistema de información y entretenimiento del vehículo, impulsado por una audaz consola central de 15,6 pulgadas.
Un asistente de IA puede predecir e ingresar la siguiente parada en la navegación basándose en entradas y horarios del calendario, mientras que niveles seleccionables de sistemas avanzados de asistencia al conductor pueden intervenir si el vehículo detecta que sus ocupantes necesitan pasar su tiempo trabajando, en lugar de conducir.
Para ayudar con esto, la marca afirma que Halcyon es capaz de conducción autónoma de Nivel 4, lo que significa que puede manejar la mayoría de las tareas de conducción mientras la persona detrás del volante interactúa con otras funciones digitales, o incluso se relaja (ver más abajo).
Siempre que estén disponibles para asumir el control en cualquier momento, Halcyon puede conducirse por sí solo de manera efectiva... si la ley lo permite.
Modo relajado
En caso de que Halcyon llegue en un momento en que los niveles avanzados de conducción autónoma sean seguros y legales, Chrysler planea ofrecer lo que llama un "modo relajado". Una vez activado, el volante se pliega hacia atrás en el tablero y aparecen tanto los reposacabezas como los pies para que los ocupantes puedan entrar en un estado más relajado y zen.
El dosel del techo de vidrio regulable y las ventanas se teñirán automáticamente, mientras que aparecerá una pantalla frontal de realidad aumentada y el sistema puede transmitir de manera efectiva cualquier forma de medios transmitibles a ese techo de vidrio panorámico.
Según su creador, el mismo HUD puede superponer información sobre estrellas y constelaciones en el cielo nocturno, en caso de que quienes viajen a bordo se imaginen como aspirantes a Sir Patrick Moores mientras navegan hacia un destino. Monóculos opcionales.
