¿Es hora de echar un vistazo a la competencia? OpenAI anunció una simplificación en su hoja de ruta de productos ChatGPT, esto dejaría en el olvido nombres como o1 y o3, por no hablar de o3-high, en cambió apostará por un estilo de marca sencillo ChatGPT-seguido-por-número-de-versión.
Con esta noticia, creo que ya es hora de que Google haga lo mismo con Gemini, y si quieres saber por qué, no tienes más que ver esta captura de pantalla que he hecho hoy de la aplicación Gemini en mi teléfono:
Es difícil mirar esa captura de pantalla y pensar que alguien en Google planeó que se viera de esa manera; es sólo cómo ha evolucionado, sin pensar en la persona que tiene que usarlo.
Como parte de la suscripción a Gemini Advanced, tienes acceso a todos los modelos lingüísticos de Google, pero tener que elegir entre siete modelos diferentes con nombres muy parecidos roza lo ridículo. Por no hablar de que creo que «Google Gemini 2.0 Flash Thinking Experimental with apps» podría ganar un premio al nombre de producto más largo de la historia. ¿Qué significa eso?
Como suscriptor de ChatGPT Plus, también tienes acceso a un número igualmente desconcertante de LLM diferentes. Algunos, como o1, son modelos de razonamiento profundo que tardan un tiempo en analizar las preguntas que les haces, mientras que otros son más pequeños y ligeros, por lo que obtienes respuestas más rápidas pero menos profundas. Es casi como si Google y OpenAI estuvieran compitiendo entre sí en lo confusas que pueden hacer sus herramientas de IA.
Muchas opciones
Lo entiendo; si te dedicas a la investigación académica o necesitas que la IA te ayude a escribir código, probablemente necesites acceder a una variedad de LLM diferentes para distintas tareas. Pero si lo único que quieres es que la IA te ayude con los deberes de matemáticas de tu hijo o a planificar tu próximo viaje por carretera, tener acceso a una selección tan diversa de LLM es una exageración.
La solución propuesta por OpenAI consiste en establecerse tras el nombre ChatGPT seguido de un número de versión, así ChatGPT-4, luego ChatGPT-5, y así sucesivamente. La IA se fijará entonces en la complejidad de lo que estás preguntando y decidirá si necesita utilizar un modelo de razonamiento profundo o un LLM más simple. Para torturar una analogía, a la mayoría de la gente no le importa cómo se hace la salchicha; simplemente quiere un perrito caliente con un sabor delicioso.
Google debería hacer lo mismo con sus diferentes versiones de Gemini. Por ejemplo, el modelo «2.0 Flash Thinking Experimental with apps» tiene la capacidad de acceder a cosas como vídeos de YouTube, por lo que puede responder a preguntas sobre ellos o extraer los puntos clave de los mismos. ¿Por qué no llamarlo simplemente Gemini 2.0, y entonces, si se hace una pregunta sobre un vídeo de YouTube, cambiar al LLM pertinente sin tener que hacer que el usuario lo elija primero?
Un vistazo a Apple
Lo que queremos es una IA que simplemente funcione, con convenciones de nomenclatura sencillas. Si nos fijamos en la forma en que Apple comercializa sus productos, normalmente tiene hasta tres versiones de un producto con un nombre sencillo que indica las diferencias. Tiene dos versiones de su MacBook, el MacBook Air y el MacBook Pro, y de su último iPhone, el iPhone 16 y el iPhone 16 Pro.
Todavía estamos en los inicios de la revolución de la IA, y las cosas están cambiando rápidamente, y la experiencia del consumidor se deja a menudo en un segundo plano. Como demuestra la decisión de OpenAI de simplificar su marca, la situación está empezando a cambiar. Creo que podemos esperar que la experiencia de uso de la IA sea mucho mejor este año; esperemos que Google también lo sepa.
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