Los Garmin Forerunner 265 y 965 fueron presentados en marzo y lo cierto es que, al menos de primeras, no nos convencieron mucho. Más allá de la nueva pantalla AMOLED, sobre el papel los relojes se parecían mucho a sus predecesores, los Garmin Forerunner 955 y 255, que tienen menos de un año y son unos de los mejores relojes Garmin jamás fabricados. La última vez que la línea Forerunner se actualizó, tardó tres años. ¿Cómo puede entonces Garmin justificar el lanzamiento de un nuevo par de modelos tan pronto?
Al principio, nos impresionó la pantalla y el chasis rediseñado de los smartwatches (especialmente el botón de acción "correr" rediseñado en el Forerunner 265, con una huella más grande), pero nos preguntamos si era un cambio suficiente como para merecer un nuevo modelo.
Después de usar el 265 durante unas semanas, puedo decir que sí, que el Garmin 265 es lo suficientemente bueno como para valerse por sí mismo.
La pantalla del Garmin Forerunner 265 está muy, muy lejos de la antigua pantalla de "memoria a nivel de píxeles (MIP)" del Forerunner. La pantalla MIP lograba un equilibrio entre ser agradable a la vista y ser claramente visible en las noches oscuras. Lo cierto es que la estética de reloj digital anticuado de colores apagados era un antídoto refrescante frente a muchos otros smartwatches "auténticos" que hay por ahí.
Me preocupaba que el brillo de la nueva pantalla fuera demasiado estimulante en comparación con los relojes Garmin antiguos.
Por suerte, ahora que he podido probar el reloj puedo decir que este no ha sido un cambio negativo en absoluto. He probado la serie Garmin Epix, que es la línea Fenix con una actualización de pantalla similar, y la pantalla del Forerunner sólo mejora la presentación de mis datos durante y después de mis entrenamientos.
El color llama la atención, pero más que un aspecto bonito, se ha prestado gran cuidado y atención a los detalles a la hora de incorporar ese color a la experiencia de usuario del entrenamiento y, en particular, a los mapas de calor de los datos de frecuencia cardiaca.
Sigo pensando que la función de tiempo de recuperación podría haberse añadido al anterior 255 como una actualización de software, pero es verdad que hace que parezca casi un reloj nuevo. Recibo una actualización matutina con mis puntuaciones de sueño y mi estado de recuperación, un entrenamiento recomendado para el día, información meteorológica y un pequeño consejo. Este último puede ser un mensaje general de perseverancia del tipo "¡lo has conseguido!" o una notificación para que me lo tome con calma basándose en una mala recuperación.
Parece una función sencilla, pero, al igual que cuando veo mi capítulo diario de la serie a la que estoy enganchada, es algo que ya forma parte de mi vida, y cuando llevo un smartwatch que no cuenta con esta función, la echo de menos. El Garmin Forerunner 255, por lo demás similar, no la tiene, así que le falta una función básica que acabas usando todos los días.
Combinando esto con los colores brillantes y el chasis rediseñado del nuevo Garmin Forerunner 265, creo que fui demasiado dura con el nuevo modelo en un principio; si bien por dentro es igual a su predecesor, la verdad es que los cambios son más sustanciales que los de las renovaciones del Apple Watch. Sin embargo, sigue siendo demasiado similar al Forerunner 255 como para que los ya tengan el reloj del año pasado se planteen actualizarlo. Eso sí, si no tienes el anterior, merece la pena comprarte el nuevo.
