Mi Samsung Galaxy S22 Ultra acaba de decepcionarme con el test de caída
Una caída de un solo metro ha sido demasiado
Todo empezó cuando noté una imperfección en la pantalla perfectamente plana de mi Samsung Galaxy S22 Ultra protegida por Gorilla Glass.
Al pasar mi dedo por la pantalla noté algo raro, aunque no podía verlo. Inmediatamente comencé a pasar mi dedo de un lado a otro del panel, que en ese momento mostraba mi feed de Google. ¿Noto algo raro? A ver... espera... vaya, ahí está.
Dejé de revisar las noticias del día y me puse a examinar la pantalla a conciencia, y de repente, me vino a la cabeza lo que me había pasado dos días atrás.
Cuando estaba en la cocina, con el móvil Android de 6.8 pulgadas en las manos tratando de repasar la receta que quería hacer, se me resbaló y se me cayó al suelo de baldosas, que estaba como a un metro de distancia.
"¿Qué ha sido esto? ¿Ha ha sido tu móvil?", me preguntó mi marido desde el salón.
Rápidamente, recogí el teléfono del suelo, y con el corazón en un puño, me dispuse a comprobar si le había pasado algo (aunque lo cierto es que tenía la esperanza de que estuviera bien, ya que lo tengo metido en una funda de goma de Samsung). Tras mirar el dispositivo, suspiré aliviada: "vale, está bien".
"¿Por qué a mi siempre se me rompe el móvil, y tú tienes tanta suerte?", preguntó mi marido.
Para empezar, quiero dejar clara una cosa: a mi nunca se me suele caer el móvil. Y sí, por si os lo preguntáis, a mi marido se le cae cada dos por tres; pero no quise contestarle eso.
Lo cierto es que ya sea mi propio teléfono, o uno que esté probando para hacer un análisis, nunca he tenido que pagar una pantalla nueva. Bueno vale, una vez se me cayó un iPad Pro de 12.9 pulgadas sobre una mesa de cristal, pero eso no cuenta porque es un dispositivo mucho más grande. Pero un móvil nunca se me había caído... hasta ahora.
Volviendo al principio de la historia, ahí estaba yo, aceptando el hecho de que esta vez sí que la había liado con la pantalla del Galaxy S22 Ultra, pasando mi dedo una y otra vez por esa imperfección que ahora notaba claramente.
Mirando más de cerca, pude apreciar que había una fina línea que iba desde encima de la cámara selfie, bajando unos dos tercios de la pantalla tirando hacia el borde derecho.
Lo cierto es que cuando el móvil está encendido, apenas se nota, a menos que haya una letra que se quede justo debajo de la grieta, ya que se queda como dividida en dos mitades un pelín desplazadas.
Esto no debería haber pasado.
Samsung ha fabricado el Samsung Galaxy S22 Ultra, que es un buen tocho de móvil, sobre la base del diseño original del Galaxy Note. Es un dispositivo grande, sólido y rígido, aunque no resulta incómodo de sostener, pesa 229 gramos y, por su aspecto, debería soportar un par de caídas.
Además, el teléfono está protegido por Gorilla Glass Victus+ (que se supone que soporta caídas de hasta 2 metros). Este resistente cristal cubre tanto la parte trasera como la pantalla AMOLED de 6.8 pulgadas, que ahora está rota. Y encima, tenía el móvil metido en una funda.
Tal vez os estaréis preguntando por qué no llegamos a esta conclusión aquí en TechRadar cando hicimos el análisis del Samsung Galaxy S22 Ultra. Lo cierto es que no hacemos pruebas de caídas con las unidades que nos envían de forma temporal las marcas para su revisión, y que obviamente esperan que devuelvas en perfectas condiciones.
No me importa sumergirlos en agua, ya que si tienen certificación IP eso es algo que se supone que está garantizado, pero dejarlos caer al suelo, sabiendo que, aunque no se rompan, sufrirán algunos arañazos, es otra cosa. No creo que sea una buena idea hacer eso con dispositivos que no son de tu propiedad... y francamente si lo son tampoco, ¿para qué jugar con fuego conscientemente?
Aun así, aquí estoy, contándoos el resultado de un test de caídas no planificado, y como veis, los resultados no son buenos.
Una caída de 1 metro, con el teléfono además protegido con una funda, no debería haber causado una rotura. Entiendo que con cualquier dispositivo con pantalla de cristal, el hecho de que se rompa a veces parece cuestión de suerte o del destino; lo que a nivel técnico significa que lo único que tiene que pasar es que el golpe sea en el punto de tensión óptimo, donde la física es capaz de fracturar hasta la pantalla más dura.
Intentaré ser optimista; al menos es "solo" una línea limpia, y no, ya sabes, un destrozo de esos que dejan la pantalla inservible, y que a veces hace que sea incluso peligroso tocarla (porque se desprenden pequeños fragmentos de cristal). En este caso, se trata de una rotura que, aunque es un fastidio, lo cierto es que hay que mirar muy de cerca para verla, o apagar la pantalla, porque es cuando más se aprecia.
También merece la pena señalar que este tipo de fisura en la pantalla no afecta al rendimiento del Samsung Galaxy S22 Ultra. El teléfono sigue siendo tan rápido y fantástico de usar como siempre... al menos, hasta que mi dedo pasa por encima de esa fina línea y me recuerda lo que ha pasado. Esta rotura también significa que el dispositivo ya no está sellado contra los elementos: a partir de ahora, tendré que tener mucho cuidad de que no se moje, e intentar no usarlo bajo la lluvia.
Me siento un poco frustrada conmigo misma, por ser tan patosa, pero también estoy algo decepcionada con el Galaxy S22 Ultra, por no haber soportado una caída tan pequeña.
Esto es algo que enturbia un poco al Samsung Galaxy S22 Ultra, pero esto no quiere decir que haya que asumir que todos los S22 Ultras sean propensos a romperse fácilmente, o que sean frágiles. Creo que en mi caso, tuve mala suerte, y el golpe de la caída dio justo en el borde superior del teléfono, pero si se hubiera caído con la pantalla para abajo, probablemente el resultado hubiera sido distinto.
Por otro lado, si tienes un Samsung Galaxy S22 Ultra, te sugiero que lo protejas con una funda, para reducir las probabilidades de que se rompa, y que sobre todo, lo sujetes bien para que no se te caiga.
Obtenga información, inspiración y ofertas diarias en su bandeja de entrada
Regístrese para recibir noticias de última hora, reseñas, opiniones, ofertas de alta tecnología y más.
Soy ingeniera informática y editora del equipo de TechRadar España. Me gusta todo tipo de tecnología, pero los ordenadores son mis dispositivos preferidos. Además de escribir sobre ellos me encanta arreglarlos, al fin y al cabo, pueden llegar a estar tan locos como yo.
- Lance UlanoffEditor At Large