'Thor: El Mundo Oscuro': ¿la peor película del UCM?
Opinión: la segunda película de Thor, estrenada en 2013, tuvo numerosos problemas
Pobre Thor. El chico de oro de Marvel llegado de otro reino se enfrentó a momentos difíciles en los primeros años del UCM. Si bien Los Vengadores tiene algunas escenas icónicas y momentos memorables para el Dios del Trueno, no se puede decir lo mismo de su segunda película en solitario.
En cambio, podría decirse que Thor está ahora en pleno auge, gracias en parte a la excelente Thor: Ragnarok y al desarrollo relativamente profundo del héroe en las dos últimas películas de Avengers.
La llegada de la irregular 'Thor: El Mundo Oscuro' en 2013 demostró que Marvel no tenía un control completo sobre el potencial del héroe. Esta es una película que no logró captar la atención del público durante la fase experimental del UCM y, aunque tiene sus fans, la franquicia de Thor aún no sabía lo que quería ser.
Elfos Oscuros, Gemas del Infinito y poco más
'Thor: El Mundo Oscuro' comienza prácticamente después de la derrota de Loki en Los Vengadores. Mientras Loki (Tom Hiddleston) está preso en una celda asgardiana, Thor (Chris Hemsworth) tiene la tarea de traer la paz y deshacer el daño que su hermano ha causado en los Nueve Reinos. Seguidamente, Thor se dirige a la Tierra cuando llega la Convergencia, un evento que conecta todos los reinos y que va a poner a Jane Foster (Natalie Portman) en contacto con el Éter, también conocido como la Gema de la Realidad.
Con el Éter atrapado dentro de Jane, Thor la lleva a Asgard para encontrar una manera de extraerle la Gema del Infinito (que en este caso es más bien una especie de plasma) antes de que la mate. Mientras tanto, el resurgimiento del Éter despierta al malvado Malekith (Christopher Eccleston) y a los Elfos Oscuros. Esta facción una vez fue a la guerra con Asgard por la Gema del Infinito, esperando que su poder los ayudara a cubrir el universo en la oscuridad. En 'El Mundo Oscuro', Thor se enfrenta a estos villanos (y a algún pariente cercano) en una lucha para proteger una vez más los Nueve Reinos de la destrucción.
Aunque es una trama sencilla, los fans pueden tener dificultades para recordar estos detalles sobre la premisa de la secuela de Thor. La historia parece tener una escala más grande que la primera película, pero falla en hacer que este lado fantástico del UCM sea emocionante: la historia sobre los Nueve Reinos esencialmente equivale a una versión aburrida de El Señor de los Anillos. Mientras tanto, Malekith sigue reinando como uno de los peores villanos de las películas de Marvel hasta la fecha.
El mal del villano
Los problemas del Mundo Oscuro no son el resultado del mantra del UCM: "todo está conectado". De hecho, Thor: El Mundo Oscuro tiene muy poco cruce con otras películas de Marvel.
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En los cómics, Malekith es uno de los principales villanos de Thor. Si quieres ver todo el potencial del personaje, lee el cómic del escritor Jason Aaron sobre Thor. El villano es complejo, astuto, moralmente retorcido y un maestro manipulador en todos los reinos. Además, Malekith tiene un aspecto distintivo: es todo de piel azul, luce un traje negro y rojo, y la mitad de su rostro tiene cicatrices negras. Por ello, es una pena que la mayor parte de lo que hace interesante al personaje no se refleje en la pantalla grande.
(alerta spoiler) La versión del UCM de Malekith no tiene ninguna de esas cualidades: es un villano oscuro y valiente sin personalidad. El Malekith de Christopher Eccleston presenta una piel pálida y una armadura ordinaria completamente negra. El actor no es malo en el papel, pero no se le da suficiente material o atención para causar una buena impresión. Es serio y malvado por el simple hecho de serlo. Incluso su momento más significativo, cuando mata a la madre de Thor, Frigga, parece vacío: apenas tiene peso ni presencia en la pantalla. Malekith termina siendo un villano estándar, prácticamente indistinguible de los matones de su ejército.
Muchas veces puede ser injusto criticar una adaptación cinematográfica de un cómic por alejarse demasiado del material original. Es especialmente injusto cuando la mayoría de la audiencia que mira dicha película basada en cómics no sabe casi nada sobre los personajes. Aún así, al ignorar los orígenes del cómic del villano en El Mundo Oscuro, Malekith termina siendo tan genérico que la audiencia se perdió lo que debería haber sido una incorporación memorable al nivel de Thanos en el UCM.
Malekith termina siendo tan olvidable porque su única motivación es un objetivo final vago de "cubrir el mundo en la oscuridad". Esa es la diferencia entre él y, digamos, la interpretación de Ben Kingsley del Mandarín en Iron Man 3, que ofreció un giro divertido (o profundamente decepcionante para otros) que juega con las expectativas del espectador.
Potencial desaprovechado
La saga de Thor siempre ha tenido la oportunidad de forjar un rincón único e impregnado de mitología en el UCM, basado en la proliferación de grandes cómics de Marvel con el personaje en los últimos años. Desafortunadamente, se necesitaron seis años y tres películas para lograrlo finalmente.
La saga de Thor se mueve fílmicamente entre dos géneros: fantasía y ciencia ficción. En la primera entrega, dirigida por Kenneth Branagh, sí se consiguió ese aire shakespeariano que tan bien sentaba a ese Thor infantiloide y arrogante, aunque la trama dejara un poco que desear. Sin embargo, El Mundo Oscuro sufre intentando dar al protagonista una transición hacia lo terrenal. Por otro lado, a pesar de que esta película nos da mucho tiempo para ver a Asgard, no hay nada que haga que el reino de los dioses parezca especial en esta película.
Al volver a ver Thor: El Mundo Oscuro, hay otro aspecto de la película que realmente decepciona: el Éter en sí. Como recurso narrativo está mal representado. Es la fuerza impulsora de Thor: El Mundo Oscuro y, basándonos las escenas postcréditos, siempre estuvo destinado a ser una Gema del Infinito, es decir, la Gema de la Realidad.
Si has visto Avengers: Infinity War, es el escaparate perfecto de cómo funciona la Gema de la Realidad, ya que quien la controla puede deformar y manipular la realidad a voluntad. Sabiendo lo que puede hacer, está claro la gran oportunidad que se perdió en este película.
El plan de Malekith de "cubrir el mundo en la oscuridad" es un plan bastante aburrido. Teniendo en cuenta cómo Thanos usa esa misma gema para convertir a los enemigos en juguetes, crear mundos falsos o transformar objetos en cualquier cosa que pueda imaginar, Malekith no parece entender cómo usar ese poder.
Lo cierto es que no hay demasiadas cosas que levanten la película. Nos podemos quedar con la aparición de Loki (quien siempre es maravillosamente interpretado por Tom Hiddleston), una gran banda sonora, unos efectos especiales que aguantan bien el paso de los años, y unos diálogos dinámicos y divertidos que dan cierta profundidad a algunos personajes del bando 'amigo'.
No es una de las mejores películas del UCM, de hecho, está haciendo compañía a Iron Man 3 y Capitana Marvel como una de las peores, pero seguramente las que acabamos de mencionar van más abajo en cuanto a calidad se refiere. El UCM perdió una grandísima oportunidad.
Afortunadamente, la serie lograría encontrar su equilibrio en Thor: Ragnarok de Taika Waititi, y finalmente se daría al Dios del Trueno un arco de personaje al nivel de Steve Rogers en los capítulos finales de la saga de Los Vengadores. En conjunto, estos darían nueva vida al príncipe asgardiano y sacarían lo mejor de la actuación de Hemsworth como superhéroe.