El Apple M1 Ultra desvela un secreto que ni los filtradores pudieron encontrar

M1 Ultra interconectado
(Crédito de imagen: Apple)

¿Cómo lo ha hecho Apple? ¿Cómo hizo la empresa tecnológica más vigilada del mundo para lanzar un producto hace casi seis meses y que nadie se dé cuenta de un detalle técnico crucial?

Cuando Apple presentó el martes el que podría ser el último de su línea de Apple Silicon de clase M1, el M1 Ultra, el vicepresidente senior de tecnologías de hardware de Apple, Johny Srouji, dijo que estaba basado en el M1 Max. Más concretamente, dijo que el SoC más potente de Apple, el M1 Max de 57.000 millones de transistores "tiene un secreto, una característica oculta de la que no habíamos hablado hasta ahora, una tecnología de interconexión innovadora". Se trata de algo llamado interpositor de silicio que hace posible el M1 Ultra.

Un momento, dijimos, ¿un producto en el mercado escondía una característica? Esto es diferente a que Apple diga: "Echamos un vistazo al M1 Max y nos dimos cuenta de que podíamos reutilizar la interconexión para construir un nuevo chip M1". 

No, el interpositor de silicio era parte del M1 Max original. Se construyó en previsión de este siguiente paso y nadie se dio cuenta (ni siquiera los expertos en tecnología inversa). Obviamente, si Apple nunca comentó esta parte del SoC, probablemente fue fácil pasarla por alto, pero la característica es más que un simple enchufe que permite a Apple conectar dos de procesadores M1 Max.

Tal y como Apple describió la interconexión el martes, permite que dos piezas, en realidad dos chips M1 Max, funcionen como una sola. Llama al proceso "UltraFusion".

Para que quede claro, no estamos hablando de dos chips M1 Max rediseñados. Son chips M1 Max originales, con el hardware, y el código que utiliza macOS para trabajar con el nuevo chip, es el mismo.

Una conexión a lo Avatar

El M1 Max fue construido, a falta de una palabra mejor, con un puerto que le permitiría conectarse directamente a otro M1. No decimos que se trate de una simple toma de corriente con su enchufe, sino más bien de la conexión que hacen los personajes de la película Avatar con los caballos. En la película, llamaron a la conexión neural simbiótica "Tsaheylu". Hacía que una persona azul gigante y una cosa parecida a un caballo se convirtieran en uno. Pues más o menos algo así hace que dos chips M1 Max sean uno y permite que el sistema que se ejecuta en él (Mac Studio) y las aplicaciones que maneja vean esas dos piezas como una sola entidad.

Suena brillante, pero también puede ser en parte una cuestión de negocios. Actualmente estamos en medio de una escasez de chips. ¿Qué mejor manera de crear un nuevo chip que utilizar los dos que ya tienes a mano? Pero queremos creer que Apple no lo ha hecho por eso.

Si construyeron la interconexión en un chip que probablemente diseñaron entre 12 y 18 meses antes de lanzarlo en octubre del 2021, no sabían nada de la futura escasez de suministros y simplemente querían construir el chip más potente de su historia de la manera más eficiente posible.

La imagen completa

Este tipo de planificación es la prueba de un gran plan maestro de procesador que entendemos mejor ahora.

En primer lugar, está el cambio de marca de cada procesador que toca Apple, desde la serie A hasta la clase M1. Se trata de un reposicionamiento de las CPU de clase de sistema para móviles y portátiles. Cuando Apple lanzó el M1 hace dos años, formaba parte de algo nuevo: Apple Silicon. Cuando Apple lanzó el A4 en 2010, fue el comienzo del procesador a medida de Apple: chips construidos por Samsung, pero diseñados por Apple.

Ahora todos los SoC de Apple, desde el A13 Bionic hasta el M1 Ultra, se llaman Apple Silicon. Son algo más que palabras. Estos chips están ahora claramente diseñados para trabajar juntos (el A13 Bionic en la pantalla Studio y el M1 Ultra en el Mac Studio), lo que significa que es el fruto de un plan a más largo plazo.

Lo que queda es el potente Mac Pro, que sigue funcionando con un procesador Intel Xeon. En la actualidad, el Mac Studio con M1 Ultra ofrece más fuerza bruta, pero carece de la capacidad de actualizarse del Mac Pro. La razón por la que el Mac Pro no tuvo uno o dos M1 Ultras está clara. Apple está construyendo la próxima generación de Apple Silicon, que probablemente ya no serán dos o más chips M1 Max unidos. Será algo aún más potente y tal vez en la parte superior de una nueva serie M2.

Tal vez.

Haga lo que haga Apple, hay que reconocerlo. Ha guardado un secreto a la vista de todos y ha desencadenado la siguiente etapa de su ya impresionante estrategia de Silicon Apple. Solo queda preguntarse... ¿qué más esconde Apple?

Antonio Romero

Editor en TechRadar España de día, guitarrista de blues y friki de los cómics de noche. ¿O era al revés?